Modelos de facturas. Las mejores plantillas para editar.

Las facturas simples son un documento mercantil, que registra la información de una venta realizada en un establecimiento comercial, o sobre alguna prestación de servicio.

Dicho documento funciona como una prueba física de la operación que fue realizada entre las partes (el comprador y el vendedor), de forma satisfactoria y legal. Además, con ella se verifica que fue una operación completamente válida y que se cancelaron los impuestos de una forma correcta.

Por esta razón podemos concluir que las facturas simples representan el cuándo, cómo, dónde, quién, qué y el porqué de las actividades comerciales del establecimiento con sus clientes.

Es importante que las facturas cumplan con ciertos requisitos legales. Cabe destacar que el proceso de facturación es obligatorio para todas las entidades comerciales registradas. Los clientes deben quedarse con el documento original, mientras que el establecimiento conserva la copia.

¿Para qué sirven las facturas?

La principal función de las facturas simples es demostrar, a través de dicho documento, que la operación comercial se efectuó legal y satisfactoriamente entre el vendedor y el comprador.

Es la prueba física que establece que se ha producido una prestación de servicios, a cambio de una cantidad de dinero determinada.

El ente comercial la utiliza como un justificante fiscal, debido a que en ellas se encuentra establecido el ingreso que recibe y los gastos que soporta, como los impuestos que corresponden al servicio que fue presado. Por ejemplo, el “IVA” o impuesto sobre el valor añadido.

Los costes que no se establezcan en las facturas no tendrán ningún tipo de efecto tributario. En este caso, no será posible incluirlos en la contabilidad de la entidad comercial, sino que será un ingreso que no estará determinado.

Las facturas simples son unos documentos que facilitan el proceso a la hora de realizar la contabilidad del establecimiento comercial.

¿Cómo hacer una factura?

Las facturas simples tienen que contener ciertos elementos indispensables. Principalmente deben establecerse los datos del establecimiento comercial, nombre de la entidad, dirección exacta, números telefónicos y número de factura.

También se incluirán los datos personales de los clientes, como nombre y apellido, número telefónico y dirección residencial. Igualmente, en las facturas simples tienen que aparecer la descripción del servicio, la cantidad de productos, o lo que la entidad comercial tenga en venta.

Es importante establecer de forma detallada los impuestos que están siendo cobrados en la factura, ya sea escrita, impresa o electrónica.

Cuando los establecimientos comerciales tienen páginas online, el IVA se aplica de forma diferente a las facturas simples físicas. Tiene que especificarse en cada pedido, de esta forma se le permitirá al cliente observar los servicios prestados detalladamente.

Todos estos elementos se incluyen en las facturas simples, lo que les otorga su carácter útil y legal.

Funciones de las facturas

La función principal de las facturas simples es demostrar que la compra-venta del producto, o de la prestación de servicios, fue realizada satisfactoria y legalmente, entre el vendedor y el comprador.

Sin embargo, gracias a ellas el comprador puede demostrar la posesión del producto, o que disfrutó de algún servicio prestado. Las facturas simples también posibilitan al comprador para efectuar un cambio del producto, en caso de que este se encuentre defectuoso.

Ellas también garantizan al estado los ingresos del IVA, y permiten un mejor control en la contabilidad del establecimiento comercial, en cuanto a los pagos efectuados y los ingresos recibidos.

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